Two Lovers

James Gray es uno de esos realizadores que parece no tener ubicación en el cine americano actual.
No forma parte de la categoría de los autores prestigiosos, no va de innovador, y por supuesto, no quiere ni oir hablar de los efectos especiales o el 3D.
Sus tres primeras cintas " Cuestión de sangre", "La otra cara del crimen" y por encima de todas la soberbia y magistral " La noche es nuestra", respiran el mismo aire que las de Coppola o Scorsese. Historias donde predominan las cuestiones más sencillas y cotidianas, con caracter y con un tratamiento ejemplar de los personajes.

El motivo de destacar al realizador neoyorquino, de ascendencia rusa, no es otro que el de recomendar su última película, Two Lovers, donde el cineasta nos ofrece la descripción de un hombre a la deriva. Un drama romántico en toda regla.
Estamos ante la historia de Leonard (Joaquin Phoenix), que tras ser abandonado por su mujer, vuelve a casa de sus padres. Después de varios intentos de suicidio, conoce a a dos mujeres muy diferentes entre si,  Sandra (Vinessa Shaw), su futura esposa y Michelle (Gwyneth Paltrow), su gran amor, lo que le llevará a enfrentarse con sus miedos internos y intentar cambiar su angustiosa vida.

Gracias a una impresionante y soberbia dirección de actores, Gray nos sumerge en una historia ya vista en multitud de ocasiones pero con un enfoque intimo y natural que llega al corazón.

Como leí en algun sitio estamos ante la precuela definitiva de todas aquellas películas que nos hablan de separaciones o rupturas sentimentales.

El trío protagonista está espléndido pero Phoenix directamente se sale, con una de las mejores actuaciones de su carrera, otorgando una maravillosa ambigüedad al personaje y transmitiendo a través de sus expresiones, gestos y miradas, su  tremendo dolor interno.